
Y me dejé tocar por tus dedos,
la más bella de las melodías,
afinando al 100% mis sentidos,
desarrollando al 100% mi sensibilidad.
Melodía que me supo a gloria,
la más bella jamás oída.
Aficionandome con ella a la música,
tu música, a tu forma de tocar e interpretar.
Simplemente me dejé tocar,
el resto o hicistes sin necesidad de más,
tan sólo con tu pasión y devoción.
Que gran artísta.