jueves, 4 de agosto de 2011

*DULCE SUEÑO*



Hoy recordé tus caricias,
sentí tu presencia y
añoré tu sonrisa.


Volví a tenerte muy presente,
casi aquí a mi lado,
aunque rapidamente reaccioné,

y volví a la realidad que me ha tocado.

Me dí cuenta que todo fue un sueño,
del que pronto desperté,
¡Ay! dulce sueño el que tuve,
cuando hoy te recordé.

1 comentario:

Juan José dijo...

Si se nos clavaran espinas en el alma; nunca hubiéramos sabido que estaba ahí.
A partir de aquí, hay que quitárselas suavemente, dándonos mucho cariño. Y procurar que sólo las espinas que se claves sea en las manos al querer coger una rosa.